Cómo convertir al trabajador en embajador de tu Marca y 9 claves para retener el Talento

El mayor capital que tienen las empresas son sus trabajadores. Si estos necesitan de aquella, en igual medida, ella precisa de las personas necesarias para su funcionamiento.

Sin embargo, los empleados no son iguales ni se desempeñan de la misma forma dentro de la organización. Los hay más valiosos no porque sean imprescindibles, nadie lo es, sino porque, a corto y medio plazo, son difíciles de reemplazar y aportan conocimientos, ilusión y fortaleza a la empresa y a sus compañeros.

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En GlobalNET Solutions, siempre decimos que el todo es más que la simple suma de las partes. Una compañía en la que los trabajadores se sientan cuidados y valorados tiene mucho camino recorrido.

¿Qué buscan, en realidad, los empleados de sus empresas? Normalmente cinco cosas, según Randstad:

  • Salarios acordes con el puesto que se ocupa.

  • Un buen ambiente de trabajo. Aquí tiene mucho que ver la transparencia y la comunicación interna de la empresa.

  • Seguridad laboral. Es de todos conocido, por propia experiencia o por la ajena, que la sensación de inseguridad frena cualquier iniciativa laboral, para en seco la innovación y la colaboración. Nadie dice ni hace nada fuera de sus funciones básicas por temor a perder su empleo. El miedo nunca es buen compañero.

  • Perspectivas de futuro. Aunque tengamos tendencia a acoplarnos en nuestra zona de confort, también nos gusta crecer y aprender. Una empresa que en la que sea imposibles estas opciones, dejará escapar cualquier viso de talento.

  • Conciliación. El poder compatibilizar la vida laboral y la personal es un punto a favor de cualquier organización, y muy valorada por las personas.

Estamos en un momento en el que la marca personal de los profesionales es fundamental pero también lo es la de la empresa, en especial de cara a conseguir el mejor equipo de trabajo. En este artículo de Trecebits señalan que, “de media, un trabajador está conectado a una población 10 veces mayor que la base de seguidores que una empresa pueda tener en redes sociales”.

Por lo tanto, dicen en LinkedIn, conseguir convertirle en embajador de la compañía pasa por cuatro fases:

  • Como en todo, es necesario seguir una estrategia que empieza por fijar los objetivos (recuerda que deben ser SMART) y por dirigirnos a las personas acordes a estos, con el contenido correcto.

  • La transparencia y la comunicación son imprescindibles, indicábamos más arriba. Hay que explicar los beneficios que la política empleados-embajadores tiene para ellos.

  • Durante el lanzamiento, deben estar implicados todos los estamentos de la empresa, desde el ejecutivo senior hasta el último trabajador.

  • Queda evaluar los resultados.

No obstante, lo difícil no es ya solo atraer el talento, sino además mantenerlo. En este sentido, hemos de tener en cuenta las siguientes claves:

  1. Cuidar a las personas desde el mismo momento en que entran en la compañía.

  2. Ofrecer un sueldo acorde con la función que ocupa y que sea competitivo, además de permitir la conciliación familia-empleo.

  3. Dar formación para el crecimiento personal y profesional de los trabajadores, pero también sobre la misión, visión y valores de la empresa. Dejemos claros, a través de manuales, aquellos puntos que consideremos necesarios, como, por ejemplo, la política de participación en redes sociales si se hace en nombre de la empresa. Pero, cuidado, no obliguemos a nadie.

  4. Crear un buen ambiente de trabajo e impulsar el liderazgo frente a los modelos antiguos de los directivos. Es mejor un buen líder que un buen jefe porque si es lo primero, será lo segundo.

  5. Valorar los esfuerzos personales y predicar con el ejemplo. En el primer caso, los procesos de gamificación bien entendidos contribuirán a generar una cultura de grupo adecuada.

  6. Comunicar pero no solo hacia ellos, sino fomentar que exista la dirección contraria. Impulsemos la participación de los trabajadores en los proyectos empresariales.

  7. Las políticas de RSC suelen funcionar muy bien para retener el talento.

  8. Ofrecer contenidos de interés más allá de los propios del negocio.

  9. Medir de forma constante los resultados para poder hacer los ajustes necesarios.

Como vemos y suele ocurrir, se trata de estrategias de sentido común para que podamos mantener a esos trabajadores que, de verdad, están aportando a la empresa. Una política de recursos humanos y de comunicación apropiada requiere tiempo, así que, es hora de empezar y en GlobalNET Solutions podemos asesorarte y ayudarte: contacta con nosotros.

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